MEXICO, 15 ene (Xinhua) -- La filial en México del banco español Santander informó hoy que recortó su proyección para el crecimiento económico del país en 2018, por la cautela inversora ante las próximas elecciones presidenciales y a la espera del resultado final del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
El banco bajó su pronóstico para el crecimiento económico de México a un 2,4 por ciento en 2018, desde el 2,7 proyectado con anterioridad, también por la incertidumbre en torno al comportamiento de la producción petrolera.
"El bajo desempeño de la inversión privada, la caída en la inversión pública y la incertidumbre sobre la evolución de la producción de petróleo nos hacen revisar el estimado de crecimiento", dijo el principal economista de la institución, Rafael Camarena, en un reporte a sus clientes.
Santander estimó que el Producto Interno Bruto (PIB) habría crecido un 2,3 por ciento en 2017.
Pese a que Santander confía en que la actualización del TLCAN derivará en la continuación del pacto, no descarta un escenario de salida unilateral en la que el comercio entre Canadá, Estados Unidos y México comience a regirse bajo normas de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
Bajo este esquema, agregó Santander, habría un "impacto significativo" en las decisiones de inversión y consumo, así como en el ritmo exportador.
"Ello conduciría a un proceso de ajuste económico y en los mercados que implicaría una desaceleración de la actividad económica hacia finales del 2018 y una significativa caída de la economía en 2019-2020", añadió Camarena.
La incertidumbre por el futuro del TLCAN ya motivó un estancamiento de la inversión privada en 2017 y hacia 2018 Santander proyecta una modesta expansión del 1,0 por ciento, siempre y cuando el pacto alcance un buen resultado, explicó.
En materia electoral, Santander espera un proceso "muy intenso y competido", con la mirada fija de los inversionistas locales y extranjeros.
"Resultará indispensable que los mercados perciban que habrá continuidad de la política de estabilidad macroeconómica", precisó.
"Un eventual rechazo a la disciplina fiscal y monetaria, así como a las reformas, daría lugar a un proceso de incertidumbre sobre el diseño futuro de las políticas públicas", completó.
En forma adicional, el gobierno mexicano todavía tiene que evaluar los posibles impactos que tendrá para el país la recién aprobada reforma fiscal de Estados Unidos.
México celebrará elecciones el próximo 1 de julio, en las que elegirá al sucesor del actual presidente Enrique Peña Nieto, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), renovará las dos cámaras del Congreso y algunas gubernaturas.
En cuanto al TLCAN, la sexta ronda de negociaciones tendrá lugar en la ciudad canadiense de Montreal, del 23 al 28 de enero, y se espera la discusión de los temas más complicados del acuerdo.
Canadá, Estados Unidos y México están renegociando el TLCAN desde el pasado 16 de agosto, a petición de la administración del presidente Donald Trump, quien considera que el pacto ha sido injusto para su país e incluso ha amenazado con abandonarlo en varias ocasiones.