Ejército brasileño toma control de la ciudad de Natal tras violencia urbana que vive la región

Actualizado a las 04/08/2016 - 15:41

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RIO DE JANEIRO, 3 ago (Xinhua) -- Cerca de 1.200 miembros de las Fuerzas Armadas de Brasil empezaron hoy a patrullar por las calles de Natal, capital del estado de Río Grande do Norte (noreste del país) tras la ola de violencia callejera que vive la región desde el viernes pasado y que motivaron la solicitud del gobernador al Gobierno Federal para que enviara las tropas.

Según informó el Ejército, fueron enviados 902 militares del Ejército, 220 de la Marina y 60 de la Fuerza Aérea, con la intención de frenar los ataques registrados en las calles, y contra edificios públicos y puestos de policía desde el viernes, con más de 40 autobuses incendiados.

En total, según la Secretaría regional de Seguridad Pública, se contabilizaron al menos 96 ataques en 33 ciudades del estado, mientras que 86 personas fueron detenidas por su relación con los ataques.

Las autoridades aseguraron que la ola de violencia fue ordenada desde los presidios de ese estado tras la decisión del Gobierno regional de instalar bloqueadores de teléfonos móviles en las prisiones.

Las autoridades ya han trasladado a cinco jefes de las facciones criminales para un presidio federal con el objetivo de desarticular esos grupos e impedir que los crímenes sean ordenados desde el interior de las cárceles.

"Ahora hemos identificado al sospechoso de liderar (los actos vandálicos) y estamos trabajando para capturar a los otros. Esta semana aún vamos a tener más detenidos", afirmó el delegado general de la Policía Civil, Cleiton Pinho.

El sistema de transporte urbano llegó a ser completamente paralizado en Natal, pero volvió a funcionar este martes con cierta normalidad, aunque para ello las autoridades han reforzado la seguridad en los garajes y en algunas de las zonas por donde transitan los vehículos.

Se trata de la segunda ola de violencia de Río Grande do Norte en poco más de un año. En marzo del año pasado, tuvieron lugar varios motines en diferentes cárceles del país y en las calles fueron incendiados autobuses, lo que provocó el envío a esa región de unos 220 agentes de la Fuerza Nacional, un batallón de élite vinculado al Ministerio de Justicia y especializado en el combate a la violencia urbana.