BUENOS AIRES, 31 dic (Xinhua) -- Expertos argentinos resaltaron hoy a China como "impulsora del crecimiento mundial", y estimaron que en 2018 las reformas económicas implementadas en el XIII Plan Quinquenal 2016-2020 reducirán los riesgos e impulsarán la confianza.
En entrevista con Xinhua, los integrantes de Asia Viewers, un equipo de expertos dedicado a la investigación de temas de Asia, hablaron sobre la economía de China, su papel a nivel internacional y los desafíos para el nuevo año.
China "sigue siendo la gran impulsora del crecimiento mundial. Se espera que el progreso de las reformas económicas implementadas en el XIII Plan Quinquenal 2016-2020 reducirá los riesgos e impulsará la confianza y el aumento de la inversión en los socios comerciales", dijeron los analistas Nadia Radulovich, Martín Dukart, Andrés de Nichilo y Sebastián Saco.
El PIB de China creció un 6,9 por ciento interanual en los tres primeros trimestres de 2017, por encima del objetivo anual del gobierno de en torno al 6,5 por ciento.
La economía ha experimentado mejoras estructurales que han permitido que los nuevos motores aporten más del 10 por ciento del crecimiento total y que la tasa del crecimiento de los ingresos de los residentes supere la general.
Tras crecer a una media del 7 por ciento en los últimos cinco años, la economía china supuso el 30 por ciento del crecimiento económico mundial y es vista como una potencia y piedra angular de la economía global.
"China se ha convertido en un poderoso actor de la economía mundial", dijo Radulovich, destacando la iniciativa de la Franja y la Ruta y la cooperación productiva internacional, así como la creación del Banco Asiático de Inversión e Infraestructura, que cuenta con más de 80 miembros de distintas regiones del mundo, "que buscan percibir inversiones en materia de infraestructura y comunicaciones", afirmó.
"De acuerdo a este 'Nuevo Orden Económico Mundial', la Inversión Extranjera Directa (IED) china se diferencia de la tradicional inversión europea o estadounidense en los países emergentes", explicó Dukart.
"La IED china se ha focalizado en los sectores requeridos por el gigante para su abastecimiento en gran medida, pero que ahora también tienen como objetivo la construcción de infraestructura y medios para poder facilitar la llegada de sus productos a nuevos mercados", agregó el experto.
Por su parte, De Nichilo dijo que entre algunos de los desafíos a los que se enfrentará "la región del noreste de Asia, está el serio problema de envejecimiento de la población y el lento aumento de la productividad, y China no es la excepción".
"La desaceleración del crecimiento de la población y el envejecimiento se debe principalmente a la disminución de la tasa de fecundidad y al aumento de la esperanza de vida", observó.
Por su parte, Saco indicó que "China durante el próximo año profundizará las reformas estructurales con el fin de frenar los riesgos del sistema financiero del país. Para ello mantendrá una política monetaria prudente y tomará medidas para fortalecer la regulación de la deuda del gobierno local, promoviendo la inversión privada y profundizará la reforma de las empresas estatales en 2018".
Por otro lado, los expertos apuntaron que "la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de salir del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP) ha dado más espacio a China, que lidera las negociaciones comerciales de la Asociación Económica Integral Regional", que incluye a la ASEAN más Australia, China, India, Japón, la República de Corea y Nueva Zelanda.
"Una vez completadas las negociaciones, pueden proporcionar un incremento del comercio y la inversión preferenciales, lo que perjudicaría al comercio de Estados Unidos con la región y supondría una pérdida de influencia política" para Washington, resaltaron.
En 2018, las "tres duras batallas" de China serán las de atemperar los principales riesgos, erradicar la pobreza y controlar la contaminación, retos en los que se esperan avances sustanciales.
La agenda económica se centrará en la reforma por el lado de la oferta, en reforzar a los actores del mercado, y en aplicar la estrategia de revitalización rural, el impulso del desarrollo coordinado urbano-rural y la apertura integral.
Desde la fundación de la República Popular China en 1949, especialmente desde la Reforma y Apertura en 1978, China ha atravesado grandes cambios. Se ha convertido en la segunda mayor economía del mundo y ha mejorado la calidad de vida de más de 1.300 millones de personas, sacando de la pobreza a 700 millones.