QUITO, 10 ene (Xinhua) -- El Ministerio de Relaciones Exteriores de Ecuador anunció hoy que no responderá a información distorsionada sobre la situación del fundador del portal Wikileaks, el austrialiano Julian Assange, asilado desde 2012 en la embajada de Quito en Londres.
"El Ministerio reitera que no responderá a rumores ni a información distorsionada o descontextualizada sobre este caso", señaló la cancillería en un comunicado, sin precisar a qué rumores o información se refiere.
El anuncio se produjo en momentos en que varios medios de comunicación locales informaron este miércoles que Assange habría conseguido la nacionalidad ecuatoriana.
Según la prensa local, el fundador de Wikileaks tiene asignada la cédula de identidad número 1729926483, y sus datos personales constan en la base de datos del Registro Civil y del Servicio de Rentas Internas del país sudamericano.
Ninguna autoridad del gobierno ecuatoriano, ni la propia cancillería, ha confirmado o desmentido estas versiones.
La información difundida por la prensa local cobró fuerza luego de que el propio Assange publicó en su cuenta en la red social Twitter una fotografía suya con la camiseta de la selección de Ecuador.
En el comunicado emitido este miércoles, la cancillería ecuatoriana se limitó a señalar que Assange obtuvo protección internacional en agosto de 2012 por parte del gobierno ecuatoriano del entonces presidente Rafael Correa (2007-2017).
"Al gobierno actual (de Lenín Moreno) le ha correspondido buscar alternativas para resolver esta situación heredada, con pleno respeto al marco legal nacional, al derecho internacional y los derechos humanos", precisó la cancillería.
Añadió que con relación a este caso, el gobierno ecuatoriano ha cumplido con la Constitución y con las convenciones internacionales al actuar con la prudencia y cautela que amerita la tutela de los derechos humanos y la defensa del derecho de asilo.
"La cancillería reitera que en el caso del ciudadano Julian Assange continuará buscando soluciones, en estricto apego a las normas y procedimientos del derecho internacional, en coordinación con el Reino Unido, país con el que se mantienen las mejores relaciones de amistad y cooperación", apuntó.
Agregó que, a petición del gobierno ecuatoriano, Assange se comprometió a no intervenir en asuntos ajenos a su condición de asilo.
El ex programador informático y periodista se refugió en la embajada de Ecuador en Londres para evitar ser extraditado a Suecia y ser interrogado por supuestos delitos sexuales cometidos en 2010, los cuales él niega.
En mayo pasado, la Fiscalía de Suecia archivó una causa pendiente por presunta violación en su contra, lo que puso fin a una larga batalla judicial de Assange.
La decisión sueca supone el levantamiento de la orden de arresto internacional que pesa contra Assange, lo cual en teoría debe permitirle abandonar la embajada ecuatoriana.
Sin embargo, la policía Scotland Yard de Londres dijo entonces que si Assange sale de la embajada será detenido por incumplir los términos de su libertad condicional cuando se refugió en la legación diplomática en 2012.
Reino Unido rechaza el asilo concedido por Ecuador a Assange, por lo tanto rechaza concederle un salvoconducto para que pueda viajar a Quito y gozar del asilo.
Assange ha señalado que el proceso en Suecia era parte de una maniobra para enviarle a Estados Unidos, donde puede ser juzgado por espionaje al publicar en el sitio Wikileaks miles de documentos filtrados de información confidencial de ese país.
La canciller ecuatoriana, María Fernanda Espinosa, dijo el martes a corresponsales extranjeros que Ecuador explora pedir una "mediación" para solucionar la "insostenible" situación de Assange.