Los organizadores de la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Río 2016 exhortaron a los atletas a participar en el evento de apertura olímpica del viernes y les prometieron "la fiesta más espectacular que hayan visto".
Algunas delegaciones, incluyendo a las de Australia y Reino Unido, han informado que muchos de sus atletas faltarán al espectáculo fastuoso de cuatro horas en el estadio Maracaná para concentrarse en sus competencias.
"Invitamos a los atletas a venir a la que será la fiesta más espectacular que hayan visto", dijo hoy en una conferencia de prensa el productor ejecutivo de la ceremonia, Marco Balich. "Hemos creado un gran desfile de atletas y un desfile artístico con una sorpresa al final".
"Los atletas son el centro del espectáculo. Sabemos que el estadio Maracaná está muy lejos (de la villa olímpica), pero alentamos a todos los atletas a participar porque será una experiencia magnífica. Y sabemos que el público brasileño reaccionará de forma espléndida, como los brasileños siempre lo hacen".
Balich ha participado antes en 16 ceremonias de inauguración y clausura de Juegos Olímpicos y Río será la tercera vez en la que es productor ejecutivo, luego de Torino 2006 y Sochi 2014.
El productor dijo que la peor recesión en décadas de Brasil ha influido en el contenido del espectáculo, que tendrá menos efectos especiales que los juegos anteriores.
Se gastaron alrededor de 21 millones de dólares en la ceremonia de inauguración de Río, cerca de la mitad de lo desembolsado hace cuatro años en Londres.
"El presupuesto es irrelevante", dijo Balich. "Creo que es el adecuado dada la situación en la que se encuentran el mundo y Brasil por lo que no tendremos una ceremonia opulenta. Deseamos brindar un espectáculo con corazón y pasión".
"Nuestro repertorio será muy analógico, pero será desplegado con importantes valores como la paz y la tolerancia, los cuales son necesarios en el mundo actual. Y hemos transmitido el mensaje de sostenibilidad que nos ha emocionado y motivado a todos".
Balich restó importancia a la decisión de la presidenta suspendida de Brasil, Dilma Rousseff, de no asistir a la ceremonia debido a que enfrenta un juicio político por presuntamente violar las normas presupuestarias. El ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva también declinó la invitación.
"Es importante que la ceremonia olímpica se quede en la mente colectiva para siempre", dijo Balich. "Uno no recuerda quién era el presidente en los otros Juegos Olímpicos. Uno recuerda a Muhammad Ali encendiendo la antorcha en Atlanta y al arquero en Barcelona. Tenemos que celebrar a la humanidad y celebrar a Río".
Otro de los directores creativos, Fernando Meirelles, dijo que las ceremonias de inauguración anteriores, particularmente el espectáculo con el que arrancaron los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, le sirvieron como inspiración para Río.
"Beijing fue asombroso, estableció nuevos estándares", dijo Meirelles. "Si Beijing fue poderoso y Londres inteligente, Río será espectacular".