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Alta representante de UE acompaña actualización del modelo económico y social de Cuba

LA HABANA, 3 ene (Xinhua) -- La alta representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Federica Mogherini, dijo hoy que el bloque apuesta por "acompañar" a Cuba en su proceso de actualización del modelo económico y social vigente.

Durante una conferencia magistral ofrecida esta tarde en el Aula Magna del Colegio de San Gerónimo de La Habana Vieja, la diplomática también criticó la hostil postura asumida por el presidente estadounidense, Donald Trump.

"Nosotros los europeos queremos mostrar que estamos más cerca que nunca de vosotros, que Cuba y los cubanos no se han quedado ni se quedarán solos. Frente a los que levantan muros y cierran puertas, nosotros queremos tender puentes y abrir puertas mediante la cooperación y el diálogo", apuntó.

A juicio de Mogherini, quien se encuentra en una visita oficial de dos días a la isla, las medidas y declaraciones de Trump sobre las relaciones de Washington con La Habana son un nuevo empeño por revertir el orden político existente en la nación caribeña, y llevarán al mandatario a un nuevo fracaso.

En tal sentido, consideró que "no es el momento para demostraciones de fuerza que no conducen a ningún lugar, y son en realidad una prueba de debilidad (...) La mejor manera de acompañar la modernización en Cuba, es con el compromiso y el diálogo".

De igual forma, señaló que la Unión Europea no aceptará la imposición de medidas unilaterales de Estados Unidos, las cuales -dijo- deterioran las relaciones económicas y comerciales entre las naciones miembros del bloque y la isla.

La entrada en vigor de forma provisional en noviembre de 2017 de un acuerdo marco entre Cuba y la UE permitirá ampliar las áreas de colaboración y extender la cooperación económica, comercial, cultural, académica, científica, potenciar las inversiones y el diálogo político, afirmó la diplomática.

La exploración de estas oportunidades es el objetivo de la visita a Cuba que inició este miércoles Mogherini, la primera desde que se formalizó el convenio, a la espera de ser aprobado por los parlamentos de los 28 Estados miembros de la UE para su plena implementación.

"Nosotros no tenemos miedo al cambio, no tenemos miedo a una Cuba fuerte, cooperativa, solidaria y abierta al mundo", afirmó.

La alta representante de la UE anunció que mañana jueves sostendrá conversaciones con el canciller cubano, Bruno Rodríguez, con el fin de abordar los pormenores de la próxima celebración del primer consejo conjunto entre ambas partes.

Además, compartirá ideas acerca de la reunión entre ministros de Exteriores de la Unión Europea y de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), prevista para febrero próximo en Bruselas, con el objetivo de reforzar la integración entre ambas partes.

Esta es también la tercera ocasión en que la diplomática se encuentra en la isla, donde destacó los encuentros con los ministros de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, y de Cultura, Abel Prieto.

También recorrió el Centro de Adolescentes en La Habana Vieja y el Centro para la interpretación de las Relaciones Culturales Cuba-Europa.

Para la segunda jornada de trabajo de Mogherini, está pautado un intercambio con el presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba, Esteban Lazo, y una conferencia de prensa en la que realizará un balance de su estancia.

Luego de dos décadas de distanciamiento y dos años de conversaciones, en marzo de 2016 Cuba y la UE concluyeron negociaciones para la rúbrica de un acuerdo marco.

La firma del acuerdo se concretó en noviembre pasado y abrió el camino hacia la profundización de las relaciones bilaterales entre el bloque y la nación caribeña.

Con ello se puso fin a la "Posición Común", instrumento político propuesto por el entonces presidente del gobierno español, José María Aznar, en un intento por aislar a Cuba del resto del mundo, al condicionar la cooperación con Europa a avances en materia de derechos humanos en la isla.

No obstante, los nexos fueron estrechándose de manera individual entre gran parte de los 28 países miembros de la UE y Cuba con el transcurso de los años, hasta situar en el segundo puesto al conjunto de Estados europeos que mantienen relaciones económicas con la nación caribeña, después de Venezuela.