El príncipe Harry y Meghan Markle en Navidad (Chris Jackson / Getty)
Paris,03/01/2018(El Pueblo en Línea)- Desde que el príncipe Harry y la actriz estadounidense Meghan Markle hicieran oficial su amor y se comprometieran el pasado mes de diciembre, la pareja no ha dejado de ser el foco de atención. Ambos pasaron las fiestas junto a la familia real Británica, asistiendo al tradicional acto navideño en la iglesia de St. Mary’s Magdalene, según La Vanguardia.
El año nuevo, sin embargo, lo han preferido recibir en la intimidad, bien lejos de sus casas para intentar así alejarse un tiempo de las cámaras. Concretamente, en la Riviera Francesa, donde han iniciado un periodo de descanso antes de iniciar los preparativos de la boda prevista para mayo.
Harry y Markle, acompañados de varios guardaespaldas de incógnito, adoptaron todo tipo de precauciones, entre ellas, elegir los asientos más solitarios de la aeronave y los que nadie quiere: los que están junto al baño. Además, tomaron su vuelo antes que cualquier otro pasajero y se dirigieron directamente a la parte posterior del avión.
Harry, de 33 años, se colocó junto a la ventana vestido con unos vaqueros, una chaqueta y una gorra de béisbol calada hasta las cejas para ocultar su cara lo más posible. Pero si alguien no había visto al grupo, dos oficiales fuertemente armados de la policía fronteriza francesa les esperaban cuando desembarcaron para sacarlos por la zona VIP.
Harry sigue así los pasos de su hermano Guillermo que en 2014 deleitó a los pasajeros cuando rechazó la primera clase en un vuelo desde Nueva York a Washington DC, donde se iba a reunir con el presidente Obama en la Casa Blanca.